No es una cuestión nueva sino la “vieja” cuestión de las preguntas que un ser humano se hace durante y a lo largo de su vida, hasta que… por fin, deja este Plano.
Evitemos tocar los viejos paradigmas, con lo cual no voy a decir “cuando una persona muere”: esto pertenece al viejo paradigma. El nuevo paradigma es: “cuando un ser humano abandona este Plano”.
Esto pertenece a la incongruencia con la que sistemáticamente han venido adiestrándonos y enseñándonos. Los conceptos “mentales” son básicos para machacar nuestras neuronas sistemáticamente, llevándolas siempre al terreno de lo incierto, y donde,… curiosamente, no se encuentran respuestas.
Al entrar y abrir-nos y abrir nuestra concepción de la Vida hacia la Cosmología y hacia la Creación completa (e inabarcable), entramos en la Concepción de nuevos paradigmas sustitutorios de las viejas concepciones, rancias, estrechas y quebradizas y sin luz con las que han tratado de “domesticarnos” y hacernos siervos útiles, siempre, en cada modelo de sociedad creado.
El título de este post está muy claro, y creo que vuestra respuesta, también. Lo que no está claro es a qué nivel comunicamos al exterior estas dudas y nos dejamos adentrarnos en oscuridades por temores, por falta de comunicación real, por-que debemos y creemos que debemos aferrarnos a “algo”, sino esta “vida” es y está, incongruentemente, VACÍA.
Si te sientes lleno y satisfecho con tu vida, nada, pero, creo que, muchos se han sentido y están engañados y por lo tanto se consideran estafados al no vivir una existencia plena tal y como desearan haberla vivido. Tanto es así que confunden totalmente el alcanzar metas para sentirse realizad@s y/o satisfech@s de y con su propia vida.
Nuestro destino no es alcanzar “metas”, ni mucho menos. Nuestro Destino, cada Destino, está codificado en sí mismo, individualmente, y el individuo (macho o hembra) es llevado o movido vibracionalmente hasta que, en teoría, pueda alcanzar su propia “iluminación” o Luz, de forma que cada ser o individuo, acabe formando parte de esa Totalidad de ese UNO/A que somos tod@s, pero del que nos sentimos, en realidad, totalmente desenraízados y perdidos, sumergidos en paradigmas absurdos o creencias totalmente inútiles.
Bueno sería pues el plantear-te-nos ciertas preguntas básicas, que son y las que con, de forma básica nos sujetan como a marionetas: los hilos de un diseño que no hemos creado ni tú ni yo, y que no sé si inventaríamos, pero que nos lo hemos encontrado al nacer ya, y en el cual nos han involucrado y nos han domesticado a “imagen y semejanza” de una maquinaria social que nada tiene que ver con la auténtica Realidad del y cada ser Humano.
Paradigmas actuales y rancios:
— Familia (incluye deseo de progenie).
— Comida (“alimentación”).
— Muerte.
— Religión/es.
— Política (incluye estados “mundiales”) y sus garras.
— Comportamiento “social” y sus derivaciones con limitaciones del tú y el yo.
— “educación” (con minúsculas).
— Metas, realizaciones (participaciones en general o metas particulares).
— Sexo y divisiones físicas sexuales.
— Aspecto físico.
Hay más, que cada cual aporte el suyo. Dependiendo de las respuestas será el nivel donde cada individu@ se encuentre en su nivel de “despertar”.
Cierro el post ya que es de debida congruencia que cada cual se someta a estas preguntas, crea o no que lo tiene muy “superado”.
Un abrazo a tod@s